No
eran más de las ocho de la tarde cuando llegamos a la Sala Creativa de
Cartagena, el pasado 12 de noviembre, era imposible perderse ya que las chupas
de cuero y las tachas te indicaban el camino. A pesar del frío muchos eran los
que hacían cola con la entrada en la mano esperando a la apertura de puertas
que tuvo lugar casi dos horas antes del inicio del concierto, para colocarse en
las primeras filas o bien en la zona superior de la sala.
La
sala no tardó en llenarse, pero a pesar de ello había espacio suficiente para
todos los seguidores de los estadounidenses W.A.S.P. El escenario con tres pantallas tapadas con el logotipo de
la banda y presentaban la gira 30 aniversario y nos preparaba para uno
de los mejores espectáculos del año.
Con
una puntualidad impecable, a las 22.00h se inició el concierto, llega la
oscuridad y el sonido de las ambulancias irrumpe en la sala, luces rojas
iluminan el escenario y uno tras otro suenan un breve de los temas de W.A.S.P., poniendo más nerviosos a los
presentes. Entonces sí, llega el momento, Blackie
Lawless y los suyos salen al escenario, Mike Duda en el bajo, Blackie a la guitarra y
voces, Doug Blair en la
segunda guitarra y el batería Mike Dupke,
se preparan de espaldas al público, nada más girarse comienzan a irradiar
energía con “On your Knees” seguida de “The
Torture Never Stops”, un mini escenario elevaba a Blackie, lo que permitía disfrutar más del show, que continuo sin
descanso con “The Real Me”. Tres clásicos de W.A.S.P. que completaron con “L.O.V.E. Machine”, todo ello acompañado con los vídeosclip de
los temas en las pantallas, que permitían ver el paso de los años en sus
componentes, especialmente en su líder, que a pesar de todo mantiene una
calidad vocal impresionante.
Llegó la hora de “Wild Child”, solo recordarlo
hace que se me ponegan los pelos como escarpias, ver el vídeo y a Blackie emulando aquellas imágenes, me
quedo sin palabras, sentías vibrar al público, luces azules cubrían a un
desatado Mike Duda a las
cuerdas del bajo y un coro al unísono llenaban la sala. Pero solo era el
principio, W.A.S.P. saco su lado más romántico con “Sleeping in the Fire”, el
púrpura cubría el escenario para una de las canciones más bonitas de los
americanos, seguida de “Forever Free”.
El primer bloque, que contenía los temas más clásicos, llegaba a su final, con
“The Headless Children” y uno de los
temas más conocidos de la banda “I Wanna be Somebody”, para el cual no hicieron
falta los vídeos, ya que el tema en sí te te elevaba a lo más alto.
Un pequeño descanso, daba paso al set de Crimson Idol, arrancaba con “The Titanic Overture”, para poner sobre
el escenario la fuerza de “The Crimson
Idol Medley”. W.A.S.P. continúo
con su repertorio, “The Idol”, llegando al final del bloque con “The Great
Misconceptions of Me”
Se acercaba la última parte del concierto, de
nuevo descanso e imágenes de unos mágicos ochenta llenaban las pantallas, se
emite el “Spinal Tap Heavy Metal Memoires” spot
comercial que entretenían a los presentes, mientras se montaba el esqueleto salido
del mismo infierno, donde Lawless
se balancea desafiando la gravedad. Impresionante solo de batería a Mike
Dupke, redobles y
carreras de velocidad en las pantallas, solo podías quedarte boquiabierto ante
tanta virtuosidad. Tristemente se acercaba el final de una noche más que
apoteósica, suena “Chainsaw Charlie (Murders
in the New Morgue)” y “Heaven's Hung in Black”, al terminar
este tema, Blackie miró más allá del
techo de la sala, rozando el cielo y dijo: “Hermano,
te echo de menos”. Clifford
L. Duren, hermano mayor del vocalista fallecía el 2 de noviembre y recibía
la trágica noticia poco antes del concierto de Tilburg (Holanda), a pesar de
todo no canceló la gira. Último tema de la noche, “I Blind in Texas”, no por ser el ultimo es menos
importante, sino todo lo contrario, momento de darlo todo, tanto por parte del
público que se fusiono en el clásico “oe,
oe, oe” que tanto nos gusta en España, y que hizo contener una mueca
risueña al vocalista, hasta que nos hizo callar a todos para arrancar la locura
de nuevo en un salvaje Oeste. La banda no desperdició la excitación que subía
desde el foso para dejarse llevar por la pasión que se estaba viviendo.
Dos horas de impresionante concierto, cierre
puntual a las 24.00h, como había prometido la banda, dos horas de un show
impecable. Doug Blair en las guitarras no derrocho ni un
acorde, Mike Dupke nos deslumbró con
su solo de batería, Mike Duda se
destaba en la locura cuando menos lo esperabas y que decir de Blackie Lawless, que es como el buen
vino, mejora con los años, una voz sorprendente, un auténtico frostman, un
músico único, agradecerle el esfuerzo de no cancelar la gira en momentos tan
duros.
Una
vez más W.A.S.P. se marchan de
España dejándonos el mejor de los sabores, el de contar los días para volver a
verlos, y después de un concierto así solo puedo sentirme orgullosa de
pertenecer a este mundo tan peculiar liderado por el Heavy Metal, por la
calidad de los músicos, por la calidad de las personas que lo componen y por
los momentos inolvidables que te permite vivir.
Texto: Ana Juan Montero, Fotos: JL Alacid
Texto: Ana Juan Montero, Fotos: JL Alacid
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