crónica: METAL LORCA 30-31/07/10 Huerto de la Rueda, Lorca (Murcia)

Un nuevo festival acercaba otra vez el metal a la ciudad de Lorca, tras el adiós del habitual Lorca Rock. Quede constancia que no se trata de una continuación del mismo, sino de otro nuevo con una nueva organización que ha querido mantener la larga tradición metalera de verano en la provincia.

Así pues, el viernes 30 se pudo disfrutar desde las 15:30 h. de las actuaciones de Infinite Darkness, Alaja, Mortis Cruentus, Atalaya y Exquisite Pus hasta las ocho de la tarde, sufriendo el fuego que cae en pleno verano por estas tierras. Debido al trabajo, el viaje de camino, llegada al recinto, acreditación y asentamiento en el camping, no pudimos llegar para ver a ninguna de las bandas anteriormente mencionadas salvo el final de Exquisite Pus, donde las aproximadamente 300 personas de público creaban un gran ambiente pese al escaso número de asistentes. Se despidieron con alguna que otra versión y me pareció que gozaron de buen sonido; más tarde éste nos daría algún que otro problema.

Como presentador del evento, Rafa Basa introducía las bandas y pinchaba la música durante el cambio de equipo en las tablas haciendo más llevadera la espera. A la caída del sol se presentaron The 4 Sakes, banda que integra algunos de los organizadores del festival, siendo su guitarrista y cantante quien más juego dio. Pese a estar un poco parados, el sonido fue bueno y la gente disfrutó y lo demostraba con unas lavadoras cuanto menos decentes. Algunos de sus temas fueron “Warm Blood”, “A chance to change”, “The plague”, “So alone” o “Unjustice justice”, con la que se despidieron a las 9 de la noche, yéndonos a tomar una cena ligera.

El siguiente concierto era uno de los más esperados por la curiosidad que despertaba la mezcla de percusión y etnicismo con el metal más agresivo, practicado con maestría por nuestros representantes este año en Wacken, los madrileños Vita Imana. Durante sus 60 minutos de show nos ofrecieron temas de su último disco que sonaron fuertes y poderosos: “Taikos”, “Nada por ti”, “Cuando despierta”, “Sin piedad”, “Parásito”, “Oculto”, “Mil caras”, “Gondwana”, “En el Edén”, “Paranoia” o “Sistema nervioso”. La nota negativa fue un fallo en una torre de altavoces que durante unos momentos dejó en “mono” un sonido tan potente como el suyo. Los mejores de la jornada sin lugar a dudas en opinión de la que escribe.

A las 22:45 comenzaban Dragonfly y fueron desgranando temas ágiles y melodiosos como “Ángeles”, “Si te vas” -con un teclado sonando de lujo-, “Dulce veneno” o “Buscando la paz”, que sufrió un desconcertante corte de sonido. Nos encantó la unión de “T2 + Livin’ on a prayer”, donde lamentablemente se cayó otra vez el sonido, “Furia” (otra vez fallo) y, tras la presentación del grupo (bastante chistosa por las bromas hacia la escayola en el brazo de su vocalista Pablo), “Dragonfly”, de su primer largo “Domine”, que también sonó mal, una pena. “Esclavo de tu amor”, “No lo verán caer” -que abre su último disco-, el cover de Gary Moore “Over the hills and far Hawai" y “Solo depende de ti” provocaron una demostración de cariño y un alboroto importantes, y se despidieron a lo grande, con pirotecnia, hasta la próxima.

A las 00:20 aparecieron los cabezas de cartel del viernes, los italianos powermetaleros Vision Divine. Sonaron temas como “The streets of Laudomia”, “Alpha & omega”, “The secret of life” y la siempre bien recibida “Wasted years” de Iron Maiden, que nos dejó una grata impresión de la banda como creadora de un espectáculo muy dinámico. Retomarían temas de su último cd de 2009 “9 Degrees West of the Moon” como “Violet loneliness” y saltarían al 1º con “Of light and darkness”, intercalando Fabio Lione un poco de cháchara en español y soltando un gran chorro de voz durante la actuación. “A perfect suicide” dejaría para el final “Touch of evil” de Judas Priest para cerrar un concierto redondo con “Send me an angel”.

El sábado todo comenzó con 15 minutos de retraso que fueron acumulándose poco a poco, aunque hacia el final de la jornada nos esperaba una sorpresita que daría al traste con los horarios establecidos, después del intercambio entre Grave Digger y Napalm Death.

Killem sufrieron para tocar a las dos del mediodía y reunieron a muy poca gente, unas 100 personas, la mayoría resguardada bajo la carpa de la barra y refrescándose con el agua en esprai que lanzaban los bordes de dicha lona (muy de agradecer durante todo el día hasta la caída de la tarde). Sonaron entre otras “Dawn”, “Ephemeral”, “Taker”, el single “Spiral” (cuyo vídeo podemos encontrar en youtube) y “Breakdown” como broche a su tiempo. Intentaron animar al público, pero éste no respondió. Sí que se congregó un número sensiblemente mayor para ver a los madrileños Dawn of Tears, que repartieron entre sus dos álbumes los temas del setlist: “Lost verses”, “Winds of despair”, “Cadent beating”, “Blaspheme natured Messiah”, “Mr. Jarrod”, “Echoes of eternal life” y “The pit and the pendulum” tuvieron una muy buena acogida. Tuvieron suerte pues gozaron de buen sonido; teniendo cada vez un directo mejor y no pierden un ápice de fuerza y oscuridad por mucho que casque Lorenzo en el cielo.

Aggression fue la banda que decidimos sacrificar para comer y sólo llegamos a escuchar “Psycho crime” y “Thrash and kill” como despedida. Los siguientes en subir fueron Avulsed, los más duros según mi criterio tras los Napalm. No dejaron oídos sin estallar: “Stabwound orgasm”, “Breaking hymens” de 2009, “Sick sick sex”, “Nullo (The pleasure of self-mutilation)”, calentita en directo pues da título a su más reciente álbum, “Maggotfilled” donde Dave Rotten bajó del escenario y fue manteado por el público, “Burnt but not carbonized” y “Exorcismo vaginal” para acabar. Mencionar que fue la primera banda coreada del festival y que a gritos de “otra, otra” tocaron “Powered flesh” como punto final a una descarga muy muy bruta de headbanging.

Breed 77 fueron para mí la sorpresa desconocida del festival, pues había oído hablar de ellos pero no los había escuchado más que esporádicamente. Los gibraltareños mantuvieron una empatía constante con el público mientras descargaban muchos de los temas de su más reciente álbum, “Insects”: “Petróleo”, “Revolution on my mind”, “Forever”, “The World’s on fire”, “The battle of hatin", “Guerra del sol”, "New disease", “Wake up”, la muy buena versión de The Cranberries “Zombie”, “Insects” y “La última hora”. La gente devolvió con mucho placer ese buen rollito que transmiten con esa fusión de flamenco, rock y metal que mezclan a la perfección. Grupo al que prestarle más atención en la península, sin duda, con un directo en espanglish muy acertado, jeje.

Para la actuación de At Vance tuvimos que esperar un poco más, hasta las 20:25 h. (40 minutos de retraso según el horario establecido, no sabemos por qué pero Breed 77 tocó bastante más de su hora). Parece ser que no llegaba su equipo, pero comenzaron con fuerza los alemanes con “Ride the sky”, “The Evil in you” y “Fallen Angel”, que sonaron muy bien y entre las que su vocalista Rick Altzi se manejaba con soltura, jugando al colegueo con los asistentes, intentando el español y soltando bromas. “Heart of steel”, “Only human”, “No escape”, “Shiver” o “Dragonchaser” adelantaban la gran aplaudida final que llegaría de la mano de “Right or wrong”, tras la que se pidió un momento para dedicar a la memoria de Dio. Otro temita más y se fueron dando paso a Rafa Basa, que a las 22 h. nos avisó de que Schmier (Destruction) fue trasladado a un centro sanitario en ambulancia, por lo que la organización se puso en contacto con Napalm Death para que éstos tocasen primero mientras Schmier se recuperaba.

Hasta las 23:10 no pudimos ver a los grandes Napalm Death, que pese a corresponderles hora y media de show, sólo tocaron 60 minutos, dejando a la gente bastante descontenta pues se trataba de los cabezas de cartel. Esa hora fue una descarga de tralla impresionante que apalizaba los oídos, su vocalista no paraba quieto poseído por un ente diabólico, pero era empatizar con el público y chapurrear el castellano y se convertía en todo un elegante y educado señorito inglés. Increíble descarga pero demasiado corta.

Grave Digger gozó también de 20 minutos menos pero fue un concierto tan intenso que no nos quejamos de su duración. “Scotland united”, “The round table”, “Ballad of a hangman”, “Wedding day”, “Excalibur”, “The Bruce”, “Valhalla”, “Cry for freedom”… Fue un conciertazo, lleno de himnos, de un sonido inmejorable, con mucho ambiente, donde demostraron que están en una forma envidiable. “The last supper”, “Knight of the cross” hicieron pedir unos bises con tanta insistencia que sonaron al instante “Rebellion” y “Heavy metal breakdown”. Un detalle que engrandece al género es su generosidad, como la que demostraron Dawn of Tears prestando su equipo a los alemanes, pues el suyo se perdió en el vuelo a Alicante.

Destruction a las 02:15 fueron directos al grano con “Curse the gods”, “The butcher strikes back”, “Devolution” y “Eternal ban”, tras la que Schmier nos felicitó por el campeonato de fútbol a gritos de viva España, abriendo un paréntesis antes de continuar con “Life without sense”, “Thrash ‘til death”, “Nailed to the cross”, “Death trap”, “Damned/cracked/reject” y “Urge (the greed of gain)”. Como decíamos, tras el retraso no tenían tiempo que perder y se dedicaron exclusivamente a avanzar el concierto con muchas ganas y ritmo, de agradecer a esas horas cuando todos estábamos ya cansados. “Tormentor”, “Bestial invasion”, “Total disaster” y “Mad Butcher” cerraban el festival a las 3 y cuarto de la madrugada, finalmente sólo una hora después del horario previsto.

Como comentario final, animar a la organización ya que hizo lo que pudo para solventar los problemas surgidos a medida que avanzó el festival, agradecer y mucho los precios populares de la barra y el camping cubierto, y el intento de recolocar los horarios tan rápidamente. Es cierto que la asistencia dejó bastante que desear, sin embargo, fue un evento al que mereció mucho la pena asistir; desde aquí espero que el año que viene llegue con más fuerza aún y la gente responda en la misma medida. ¡Mucha suerte y mucho metal!

TEXTO Y FOTOS: Sonia Cigüenza y Jesús Bellón

crónica: WACKEN OPEN AIR 2010 (sábado)

OVERKILL se puso en escena como si fueran dinamita, con esa buena forma que caracteriza a su frontman Bobby “Blitz” Ellsworth, quien no tardó en quitarse la camiseta para lucir las horas de machaque que su fisionomía lleva en el cuerpo. Su característica voz adornó el siempre sólido y habitual sonido de bajo o viceversa, sino, no serían ellos. Concierto correcto que con otra selección de temas podía haber tenido otro trote, pero el calor no ayudaba a enfocar otras opciones y nos conformamos disfrutando de “Hello From The Gutter”, “Coma”, “Ironbound” o el “Overkill” de los Motörhead hacia el final.

Después nuevo dilema de contrapuntos sonoros programados al mismo tiempo. Como aún era temprano y por el recinto me podía mover con soltura decidí partir en dos mis visionados para catar el amargor de LOCK UP con una clara referencia grindcore de raíz pasada de vueltas, teniendo como aliciente en la batería a ese bruto llamado Nicholas Baker y en el bajo a Shane Embury de Napalm Death, pues no olvidemos que aunque aquí toque otro instrumento es su proyecto paralelo. Y como no me terminé de convencer probé del café con leche que ofrecía DELAIN, banda holandesa de Martijn Westerholt, quien fuera teclista de Within Temptation. El café y la leche iba a partes iguales entre la voz de niña buena de ella (Charlotte Wessels) y la del tío que con su voz gutural machaca todo aquello que suene angelical, en este caso era George Oosterhoek (Orphanage) quien ya participara como invitado de la banda en el primer disco “Lucidity”. El azúcar lo ponían en distintas proporciones los compañeros de faena, con mesura, y si te gustaba la temperatura del sonido pues mojabas tu galleta en su música y bueno, creo que así ya merendabas a gusto. La verdad es que molaron.

WASP hicieron uno de los conciertos sobresalientes de la tarde. No escatimaron en el tiempo y en una hora recorrieron buena parte de sus canciones más representativas. Las gafas de Blackie Lawless por el sudor o porque no le encajaba la montura bien, fueron protagonistas de un continuo tic del cantante, maniobra que iba tan acelerada como la hoja de sierra que Doug Blair lucía en una de sus guitarras cuando se ponía a girar. Son de esas cosas decorosas que llaman la atención a nivel estilístico, pero lo importante fue que los cuatro fueron realmente jinetes del Apocalipsis.

STRATOVARIUS y CANNIBAL CORPSE, también programados a la misma hora eran la cara y la cruz en dos escenarios que algunos seguidores podían interpretar como extrañados. Mientras el gringcore de Cannibal sonaba rotundo, hiriente y te cautivaba por la forma tan espontanea que tienen de controlar un directo tan brutal y efectivo, Stratovarius eran relegados a tocar con muy mal sonido en el party Stage, donde con todo el respeto para las bandas que allí actuaron, al no estar ya Timo Tolkki con ellos parecían estar relegados a una categoría inferior. Ni lucieron, ni sonaron bien, ni me convencieron a pesar de tirar de clásicos entre cortes de su “Polaris” e intentar sin éxito enmarcar su show en los toques clásicos de su teclado.

EDGUY o hablemos mejor de Tobias Sammet, es una mente creativa y un músico muy querido en Alemania, amén de respetado, de hecho ya sabemos a estas alturas que Avantasia estará en la próxima edición. Salió a escena con el público ganado, con un escenario imitando decorados de piedra, y muy coqueto en imagen, una de sus particularidades. Con “Dead Or Rock” y “Speedheaven” empezó la cosa, de dudosa ecualización, mejorándose el sonido poco a poco. Tuvo por bandera el lenguaje del heavy metal que todo el mundo entiende. Le acompañó Michael Kiske en “Superhero” y “Labotory Love Machine”. Tuvo su momento para la balada sentimental en “Shine Me”, acompañado por las voces del público y entregó su corazón en “Sacrifice” a una persona en silla de ruedas en pleno show al tirarse con el una foto mientras cantaba.

INMORTAL consiguieron tener expectantes a gran parte de los asistentes aunque no fueran seguidores del black metal, aunque no lograron convencer a todos, pues algo de fuerza y tal vez más impacto les faltó. Si en lugar de tocar bien entrada la noche hubiera sido de día (como ya tuve ocasión una vez de verles sudando a pleno sol sus pinturas) hubieran impresionado nada o menos. El trío noruego no medió palabra sobre el escenario. Tocó de forma estática con esa sonoridad densa y sin hacer demasiado ruido en lo referente a decibelios. Algo de fuego y pirotecnia para decorar tanta oscuridad en la niebla y caras muy feas y tenebrosas en unos primeros planos que mostraron a conciencia los realizadores de cámara por las pantallas del recinto. Fueron poco más que diabólicos.

A Max Cavalera dentro de SOULFLY le veo hace tiempo algo clavado sin avanzar, pero es cierto que en conciertos como este también sin retroceder en posturas. Puso a botar a todo el mundo que quería saber de algunos temas de Sepultura al realizar “Refuse/Resist”, “Troops Of Doom”, “Roots Bloody Roots”, dejando tocar un tema a su hijo la batería, algo que forma parte de la gira puesto que viaja siempre con su familia. Y tuvo el feo detalle de pasar de la organización al incitar por el micro para hacer “circle pits”, cuando se lo habían prohibido a todos los artistas. La organización supongo quiso ser cauta tras la tragedia ocurrida pocas semanas antes en el festival de música electrónica Love Parade, celebrado en la localidad alemana de Duisburgo.

FEAR FACTORY fueron como un ciclón haciendo que su sonido golpeara con rotundidad como si fuera un muro por todo el recinto, lo que hizo que TIAMAT, quienes actuaban al mismo tiempo en el escenario paralelamente opuesto notara como sus silencios y momentos musicales más suaves, eran arrebatados de la intimidad que necesitaban. La banda de Dino Cazares y Burton C. Bell, pues son los dos únicos integrantes originales que allí estaban, mostraron esa inquietud de sonido compacto y nervioso al hacer temas clásicos como “Shock” o “Demanufacture”, repasando con “Fear Campaign”, “Powershifter” y “Replica” su álbum más reciente. Mi ganas de ver a ambas bandas me haría oscilar entre los dos escenarios, algo que aunque no es muy aconsejable a veces no queda más remedio cuando se trata de dos bandas que te molan tanto. La intensidad sonora que se respiraba ante el público de Tiamat tenía otra candencia, pues venía haciendo el repaso de su disco “Wildhoney”, sin duda el más aclamado de su trayectoria. Los ambientes progresivos e intimistas de esta obra fueron interpretados fielmente tal y como se editaba en 1994 con ese toque particular que en las voces y guitarra Johan Edlund le da. No disfruté del concierto como sí lo hice en su año, pues con el vaivén que llevaba de un lado hacia el otro no puedes captar la magia íntegra de su interpretación.

Y UDO sería quien pondría el final a la fiesta de todos los días y de tantas sensaciones de bienestar acumuladas. Fue el icono correcto para repasar viejos clásicos de Accept entre composiciones propias ante un público reducido. La lluvia, que había respetado este año a los asistentes hacia su aparición, el frío de la madrugada golpeaba y el cansancio seguro que hacía mella. Con ese plantel podría decir que me hubiera conformado con haber visto un show de transición para reflexionar lo vivido e ir marchándome para brindarme un descanso antes de continuar camino al día siguiente, pero una vez más ofrecieron intensidad y espectáculo como si nos volvieran a meter en un nuevo comienzo de la edición de Wacken, puesto que no olvidemos que Udo Dirkschneider fue artífice de hacer que florecieran nuestras primeras emociones en el pistoletazo de salida con Skyline. Terminada la edición llega la conclusión: el círculo sigue su curso, y dentro de un año la nueva parada se llamará WACKEN 2011.

Raúl "Mr. Virus" García

crónica: WACKEN OPEN AIR 2010 (viernes)

ORPHANED LAND fue una de esas bandas atípicas que merecía la pena conocer en directo por la sonoridad de raíz que imponen estos israelitas. Su cantante con ese aspecto a lo Jesucristo pareciera haber salido del mismo evangelio, vistiendo una túnica blanca para ambientar aún más la historia que te transportaba al mismísimo Jerusalén. Gran concierto con baile y danza femenina en el trascurso de su génesis.

Breve visita al W.E.T. Stage para ver si ASTRAL DOORS siguen siendo fieles en directo a ese corte tan claramente hardrockero que muestran es sus discos, y efectivamente. De Rainbow a Dokken un abanico de sonidos vocales muy parejos que incitaban a la marcha, aunque desgraciadamente el show quedó algo desnivelado por el mal sonido.

ILL NIÑO era el primer show que hacían en dos años y quien no les hubiera visto nunca interpretaría que tenían ganas de destrozarlo todo con ese impactante sonido, y puede que algo de hambre tuvieran, pero es que esa intensidad a esta fusión de músicos latinos yo siempre la achaqué en sus directos. Bestias desde sus primeras notas resaltadas por melodías y armonías que supieron equilibrar en todo momento, con partes latinas que en determinados temas interpretan en castellano, así como hicieron sonar algunos temas matizados con acordes flamencos, sin olvidar los contrastes de esas percusiones que no dejaban de motivar, tanto como la batería de Dave Chabarri, quien en alguna ocasión tuvo que ver como se le aflojaba el charles de la pegada que daba.

A continuación los alemanes BOSS HOSS armados de otros elementos musicales de percusión, contrabajo y armónica, se presentaban como una de las sensaciones del festival tras el descubrimiento que supuso ver a estos tíos enfundados en sus sombreros de cowboy durante la pasada edición. Programados en uno de los escenarios principales le dieron al festival tinte de sonido sureño con fusión de rock y de metal. Hicieron versiones a golpe de banjo de los Beastie Boys y de Ministry (¿?). Subieron a algunas chicas a bailar ante un público tanto expectante como comprensivo y cerraron con un country-blues. Altamente recomendables para festejos de cierre, y como comprobamos, también bajo un sol de justicia.

Los también germanos ENDSTILLE podían dar a entender con su imagen un contrapunto a las modas de limpieza y vestimenta fina, pero en realidad, ellos pudieran igualmente estar a las modas de lo sangriento, desdeñando el pensamiento racional de la raza humana, más cercanos del raciocinio animal... o tal vez podían darnos a entender que estaban más próximos a los psicópatas sanguinarios de cualquier capa social, porque la sangre era sangre, las alambradas de espino eran su frente y el filo del cuchillo cortaba finamente la lengua de su cantante para dar un espectáculo poco recomendable antes tus sobrinos. Fue un show premeditado y sobre todo muy visual.

A continuación KAMELOT se presentaba como otra de esas piezas que nunca fallan en el computo final de cada show que realizan, como si fueran tecnología alemana, tal para cual. No empezó bien porque hasta el tercer tema aquello no se escuchó sonorizado en condiciones y a partir de ahí pudimos escuchar con brillo la voz de su corista. Poco varíó respecto a otras veces sus representaciones, con novedosos temas y ese toque medio gótico que le da Roy Khan con la vestimenta. Las armonías brindan de largo con las llamaradas que le rodean. Los petardos, el colorido de las luces, los particulares apoyos de teclado y ese momento con ambas chicas desfilando al redoblar de sus tambores con los ojos vendados hicieron el show de tendencia totalmente épica.

GRAVE DIGGER causaron mucha expectación, pues aparte de ser de la tierra, habían anunciado que interpretarían íntegramente el disco “Tunes Of War” para grabarlo en un DVD que llamarán “Tunes Of Wacken”. Tal como abre ese álbum empezó a sonar “The Brave” con ellos vestidos a lo “Braveheart”. Desde ese momento el espectáculo no cesó, primero por el conjunto de gaiteros, luego por la aparición de Doro Pesch y Hansi Kusch de Blind Guardian, y para rematar los Van Canto haciendo coros. Su teclista fue parte activa admirada por su vestimenta de muerta. Me dieron ganas de salir corriendo por la espada de Excalibur, pero no estaba yo en esos momentos muy en condiciones.

SLAYER comenzaron la agotable faena con “World Painted Blood” y aquello empezó a sonar explosivo con un Tom Araya iluminado por la multitud y comunicativo con el público. No pararon el ritmo de actuación entre canciones tanto como acostumbran. Difícilmente podías moverte estando dentro del epicentro situado en buena parte de la extensa explanada, mientras desde fuera no dejaban de surfear personas que sin intenciones te golpeaban con sus extremidades tu cabeza, por fortuna no surfean boca abajo, por lo que le pudieran meter a más de uno o de una dentro de la boca. La explosión final vino con los temas “Raining Blood”, “South of Heaven” y “Angel of Death” consiguiendo realizar un memorable encuentro con el público germano.

Los canadienses ANVIL han visto como la película sobre su vida ha llamado con cierta notoriedad la atención. Ellos siguen erre que erre sobre el escenario en formato de trío, dándolo todo, con una escenografía y sonoridad clásica, y sobre todo con unas formas divertidas de entretener a quien tiene ocasión de verles. Hablan por las pastillas de sus guitarras (además de por el micro), tocan con un consolador (dudo si lo llevarán para otros menesteres) y yo creo que a estas alturas del guión les da igual lo que pase por la cabeza de quienes saben de su existencia (están pasados vueltas). La actuación fue cojonuda.

Para cerrar la noche tenía existían dos opciones nada desdeñables, pero programadas al mismo tiempo, Atrocity o CORVUS CORAX, y considerando una vez más lo difícil que resulta poder ver tal despliegue de músicos tocando tal variedad de instrumentos autóctonos, no tuve muchas dudas. Su música sonó medieval, refugiada en los “cantus buranus” que inspira la ópera basada en el manuscrito original de Carmina Burana. Allí se escuchaban amplificadores, el sonido interpretado por coristas y soprano era el equivalente a una representación de un teatro, como si estuvieras en la ópera, además con continuos lanzallamas haciendo diversas figuras, así como exhibiciones de luchas con espada ambientadas en la época, tal cual, como lo eran las vestimentas de las decenas de involucrados. Genial final de altísimo contraste musical para cerrar la noche y preparar nueva embestida al sábado.

Raúl "Mr. Virus" García

crónica: WACKEN OPEN AIR 2010 (jueves)

Bajo el slogan “A Night To Remenber” el jueves asistíamos a las 16 h. a la sesión inaugural a cargo de SKYLINE, quienes teniendo al frente del bajo a Thomas Jensen, uno de los artífices de la organización del festival, interpretaron clásicos como “Breaking The Law” de Judas Priest y “Shot Down In Flames” de AC/DC, contaron con Udo como padrino al tiempo que con Doro como madrina para rememorar otros grandes del metal. Este hecho ya hacía más que apta la ocasión para estar allí y brindarles la presencia y el respeto. Ambos nos dieron por partida doble su interpretación del “We Are The Metalheads”, el himno del festival hecho para corear, y supieron ilustrar como siempre los propios “All We Are” de Warlock, así como “Balls To The Wall” de Accept poniendo color a las sensaciones de diversas generaciones que allí se fusionaban, con un redondeo hímnico al tocarse “Holy Diver” como tributo a Ronnie James Dio. La excitación, a mi particularmente, me hacía ser todo próstata en ese momento, así que con la erección encima y a la carrera, decidí ver por lo menos parte de la actuación de nuestros representantes españoles VITA IMANA que con un breve set list actuaban en el W.E.T. Stage dentro de ese peculiar y digno enfrentamiento entre bandas, The Batlle of Metal, y que estuvieron a punto de llevarse como vencedores al quedar en segundo puesto, siendo los primeros los finlandeses Battle Beast. Lo que pude observar de ellos lo define en primera instancia temas como “Batukada” en donde se dejan llevar por la estructura que colorea muchas de sus interpretaciones, y “Sistema Nervioso” con lo que cerraron. Provocación viva en vivo, aún con un set corto, pero seguido apasionadamente por curiosos desconocidos y múltiples compatriotas que no dudaron en arroparlos con las banderas representadas.

ALICE COOPER actuaba a continuación siendo de día aún, con lo cual su espectáculo teatral no andaba muy iluminado, pero no fueron pocas las continuas atracciones que empezaron a desfilar sobre el escenario desde que hicieron sonar “School’s Out” y con las mismas notas hasta cerrar con el mismo soniqueta. No olvidó muestra alguna de toda su parafernalia, dígase degollamiento, guillotina, fusta, samuráis, esqueletos, agresiones, locuras, camisa de fuerza, silla de ruedas, regalo de collares de perlas de plástico…un puto circo donde tanto él como los que allí estábamos perdíamos las cabeza disfrutando con algunos de los cortes más atractivos de su carrera, sin importar demasiado si hacía temas más actúale, como tampoco importaba mucho preguntarse si podía cantar mejor. El espectáculo fue la garantía y siempre estuvo respaldado por una banda de altura y la particular interpretación de Tiffany Lowe con su personaje sensualmente diabólico.

MOTLEY CRUE ofreció un revival de su propia historia con momentos más actuales. El escenario simulaba ser la ciudad de Los Angeles hecha mierda por un robot, buen respaldo para su puesta en escena, cubriendo los deficientes movimientos de Nicky Sixx y Mick Mars, pero ojo, con la voz Vince Neil bastante acertada para los tiempos que corren, quien supo llevar con desmelene actitud y movimiento por el escenario cuando lo brindaba la ocasión. Adaptados a los tiempos o mejor dicho, el tiempo adaptado a ellos, nos hizo sentir como se transmitía la esencia de su historia y de su música. Lo consiguieron desde el comienzo con “Kickstart My Heart” enlazando con “Wild Side” y “Shout At The Devil”, hasta llegar a su más reciente “Saints Of Los Angeles” y pensando en un no parar… aquello fue una locura con algo de pólvora, lenguas de fuego y muchos cánticos de los asistentes. Un acierto tenerlos allí a esas horas, sin haber digerido en tan poco tiempo lo visto y sabiendo lo que esperaba después. El final no podía ser más redondo con “Dr. Feelgood” y “Girls, Girls, Girls”.

Bien iba la cosa a la espera de IRON MAIDEN, más comprobando que esta vez para tal acontecimiento no parecía misión imposible verlos desde alguna cómoda o incómoda posición, pero al menos verlos sin tener que recurrir de manera obligada a las pantallas, como ocurriera hace un par de años. Sonando las notas del “Doctor Doctor” habituales para comienzo de show y pillándome en pleno papeo algo retirado, ya me imaginaba que la posición para visionar no iba a ser cómoda, pero bueno, después de andar durante los primeros temas cual peregrino fuera hasta estabilizar la posición, la cosa se pudo disfrutar sin zancos. El show y sus decorados venían a cuenta de su nuevo trabajo “The Final Frontier” donde ya sabíamos que nos caería “El Dorado” como único tema. En términos futuristas así obraron los decorados y el Eddie que llegó a tener varias secuencias de lucha con Janick Gers de manera interactiva, ya que las podíamos observar por las pantallas del recinto como eran las miradas de ataque hacia el guitarrista a través de una cámara colocada en los ojos del “emblema crecidito”. Muchos de los clásicos esperados no se tocaron en detrimento de canciones que habría quien no deseara y que desde mi punto de vista, hicieron más interesante el concierto para distinción de los shows con los temas de siempre. Empezaron con “The Wicker Man” y “Ghost Of The Navigator” y la gente adaptada a sus temas más recientes tendrían clásicos venerados como “Wrathchild” a mitad de show o “The Number Of The Beast” y “Running Free” ya en el bis. La forma física de Bruce Dickinson quedó una vez más por encima de todos sus compañeros juntos, dejemos a parte a Janick, aunque el resultado en términos de grupo fue sobresaliente. Las luces, los silencios, las guitarras acústicas en cortes como “Dance Of Death” o “Hallowed Be Thy Name”, y sobro todo el calor del público que siempre tuvo muy presente, especialmente cuando Bruce dedicó “Blood Brotheres” a Dio, recordando lo que había significado para el en sus comienzos antes esa masa de metaleros entregados.

Raúl "Mr.Virus" García

crónica: WACKEN OPEN AIR 2010 (intro)

Nueva escapada hacia tierras germanas con una idea preconcebida de lo que iba a acontecer este año, sabiendo de los escenarios programados y del más de un centenar de grupos dispuestos a pasear por los respectivos escenarios. Así que…un año más tocaba estructurar el programa e intentar ver las bandas correspondientes. Claro que, si piensas que además tienes la posibilidad de visitar dentro del recinto una zona medieval, una villa vikinga, incluso ser víctima voluntaria para que te den con una fusta o te quemen en la zona de torturas, e incluso subirte a un búfalo mecánico para hacer el “Bill”… no te quedará mucho tiempo para pensar fuera del “entorno Wacken”.

Estas son sólo algunas de las curiosas atracciones o entretenimientos que pudieron disfrutar los 75.000 metalheads visitantes acreditados por la organización este año, pero además, también los mercadillos o tiendas para poder comprar ropa o discos formaba parte de la distracción, algo que siempre es recomendable tener en cuenta para no desgastarse concierto tras concierto de una punta hacia otra, más aún, teniendo en cuenta que esta edición brilló por su espectacular sol y el por lo tanto la fatiga que otorgaba el calor por el día, siendo la temperatura de “choque” por la noche, al pasar a temperaturas de picos muy bajos.

El enclave donde se celebra Wacken, cada vez más incipiente en estructuras, no tiene demasiados secretos para quien decide repetir cada año. No obstante el desvirgue anual es recomendable nada más llegar, y lo puedes hacer dando una pequeña vuelta según pones pies en el lugar para dejar en orden tu acreditación, intentando conseguir una de las clásicas camisetas oficiales de temporada o ingiriendo algún liquido fresquito mientras capeas el recinto y visionas los primeros seres humanos que se han querido beber las existencias de cerveza antes de que empiece todo. Es curioso ver en algunos puntos a personas venidas al suelo o apoyadas en cualquier poste, estos detalles tan bien colocados, a veces parecieran los pusiera el ayuntamiento o la organización para ambientar. No lo es menos comprobar como de vez en cuando alguna persona se acerca a estos seres decorativos para moverles el cuerpo inerte, tocarle el pecho y comprobar o que es de carne y hueso o que respira y se encuentra bien, como gesto saludable.

Los asistentes se preocupan por las gentes, aunque no se conozcan entre sí. Aquí se hacen amistades, y además coincides con ellas en las sucesivas ediciones. Esto es parte del verdadero espíritu de Wackeeeeen ¡!

review: A PALO SEKO (El Disko Rojo De A Palo Seko)

8,5/10

Muy atrás se pierden los tiempos en que A Palo Seko eran considerados una banda que repartía estopa, con letras reivindicativas, sin pelos en la lengua; pero que como músicos no tenían demasiado que ofrecer. Lo primero se mantiene ha día de hoy y para comprobarlo solo tendrás que echar un vistazo a las letras de este nuevo disco de los de Alcalá de Henares. Como comprenderás, tampoco el disco es rojo por casualidad. Pasan los años, pero por fortuna hay ideales que se siguen plasmando con fidelidad en uno de los grupos que más, más alto y más claro ha cantado en todos sus discos.

Por el contrario, ellos que podían grabar un disco en tiempo record y que no dejaban de estar en el candelero con nuevos trabajos de forma constante, esta vez se han tomado su tiempo para ofrecernos una nueva obra. Espera que ha merecido la pena, ya que aquí podemos encontrarnos un conjunto de canciones meditadas en el aspecto ideológico y creativo. La inteligencia siempre me ha parecido un don de esta gente, que además aquí hacen gala de variedad en el aspecto musical y de composiciones trenzadas, sin perder el prisma de lo que siempre ha sido A Palo Seko.

Todo esto lo podemos comprobar en temas con cambios de ritmos y versatilidad como con “Maquis Guerrilleros”, que tampoco deja de ser un tema muy directo para comenzar en una onda muy hardcore, pero que ya nos ofrece pinceladas como la del violín a cargo de Samuel Martin. El estilo del grupo sigue siendo único e incalificable, motivo por el cual este álbum seguirá atrapando por igual a punks y metaleros que gusten de la caña burra del Henares. “Fraternización En El Frente 1914” nos cose a riffs de guitarra, mientras que la brutalidad se extrema en “Si No Me Conoces”, una nueva bofetada auténtica y violenta en el haber de A Palo Seko. Que hoy en día la música de la banda se puede llenar de matices lo demuestran cortes como la versión personal, adaptada a su forma y lenguaje de “Killed By Death” de Motörhead. Podían haber plasmado otro tema asesino y quedar de maravilla, pero los alcalaínos han querido dar un guiño distinto.

La banda sigue manteniendo en constante relación el sentido del humor ácido, unido a una mala ostia que les sale de muy dentro. A veces los dardos pueden ser envenenados como en el caso de “El Primo De Rajoy” y otras veces simplemente nos podemos echar unas risas intentando entender desde el lado masculino lo que supone para las mujeres tener la regla “Cada 28 Días”. Tal vez el tema de significado más vano, pero de nuevo demostrando una compleja estructura. Al contrario que uno de los más directos y con un ápice de melodía “Mi Pueblo”, con la colaboración a la batería de Gabi de Beholder.

La reivindicación y la crítica entran a saco en “La Versión Oficial”, la llamada a actuar nos llega de la mano de “Dales Una Sorpresa” y “La Solución Es No Pagar”; y el final es con “Patria”, que merece mención aparte porque para quien suscribe es el mejor tema del disco. Comenzando por el discurso a cargo de Juanito Sangre, siguiendo por el propio significado del texto y acabando por su composición, contando con caña burra y con detalles como esa parte ska.

En definitiva, que este disco de A Palo Seko se disfruta de principio a fin, que no dejas de encontrar alicientes para escucharlo una y otra vez, que se mantiene fiel a la brutalidad de la banda para que los adictos a estos sonidos no bajen de esta nave en constante busca de lucha y que hará que muchos más se sumen a la batalla atraídos no solo por sus mensajes, sino por el verdadero valor de esta obra en el aspecto musical. La unión hace la fuerza y “El Disko Rojo De A Palos Seko” es un nuevo llamamiento para ello. Incitación para reaccionar a base de potentes ritmos, contundentes guitarrazos, rabiosas voces... y no quedar indiferente ante lo que hay que ver y oír a diario.

ANTONIO REFOYO
antonio@lamiradanegra.es

www.apaloseko.net

review: PORCELINA (Vorágine Aborigen)

7,5/10

La dualidad contradictoria suele dar buenos resultados. Porcelina realizan la tan recurrida combinación de fuerza y melodía a su manera, dejándonos diez cortes abiertos a un público variado tanto si se quedan con la palabra rock como metal y tanto si degustan los clásicos sonidos o los modernos.

Cuando nos topamos con un tema como “Nunca Hables De Mi”, lo primero con lo que nos podemos quedar es con esos secos riffs y esa melódica voz que nos puede hacer llevar esto al terreno más actual del rock. Sin embrago, encontramos de manera muy arraigada una consistencia stoner que descubriremos que termina siendo algo básico en el sonido del grupo. Sin ir más lejos podemos continuar con “En El Núcleo”, con nuevo riff potente y rockero. Y es que si profundizamos en temas como “Me Puedo Conformar” u “Hoy” podemos encontrar mucha afinidad con grupos de los 70 y más en concreto una cercanía al “Planet Caravan” de Sabbath. Les gusta a estos músicos dejar ciertos guiños de psicodelia en algún tramo de sus temas, aunque se trate de cortes que no se recreen tanto como los anteriores, caso de “Estás Enterrado” o “El Gusano Del Templo” que, si no del todo comerciales, cuentan con una voz limpia y clara que deja asequibles melodías sobre toda esa potencia, al margen de los giros que puedan poseer unos temas donde siempre hay espacio para que las guitarras vuelen a su antojo. Así ocurre también en el homónimo, en “Yugoslavia” y en el tema más oscuro de todo el álbum como es “La Madriguera”.

Puede que se eche en falta algo más de diversidad a partir de la mitad del disco, pero es realmente destacable la forma en que han hecho casar Porcelina una música de fuerza tan salvaje con una voz tan melódica y actual. Esas dos facetas tan contrapuestas no se repelen en ningún momento, sino que se dan la mano para mostrar un estilo nítido y consolidado, tal vez más moldeable de lo mostrado en estos temas, pero que no cierra la puerta a nadie que se acerque a la escucha.

ANTONIO REFOYO
antonio@lamiradanegra.es

www.myspace.com/rockporcelina

review: NIGHT BY NIGHT (Can´t Walk Away)

8/10

Night By Night es la banda del guitarrista de Sisters Of Mercy, Ben Christo, que nos presenta este segundo EP con tres temas destinados a los seguidores del hard rock de corte clásico, sin renunciar a proponer su propio toque actual. De hecho, estas canciones que te pueden sonar a clásico no caen en estereotipos en ningún momento. Y eso que “The Moment” en los 80 hubiera sido un hit seguro. Un tema directo con un estribillo que se clava y que te mete muy buen rollo. Pero no caen Night By Night en el ABC de este estilo denominado hard rock. A “It´s Not Faith” se le puede sacar más partido que a la mayoría de las bandas que con estas premisas se presentan en la actualidad. Es un tema que a la vez de melodía posee unos riffs de guitarra cortantes, cambiante en su desarrollo. Estos chicos le inculcan a su música la melodía de bandas como Deff Leppard, con esa elegancia, pero a la vez tienen la macarrería de unos Mötley Crüe. Cuidan su sonido, pero esos coros no dejan de traslucir una banda callejera sin llegar a esa envoltura de las bandas más melódicas. Así lo comprobarás en el propio “Can´t Walk Away”. En la evolución de la música muchos han roto abruptamente el lazo de unión con el pasado. Night By Night son una evolución mucho más lógica del hard rock de siempre. Son un soplo de aire fresco para los amantes de este estilo que no quieren quedarse en lo de siempre y buscan nuevos alicientes. Night By Night se los ofrecen.

ANTONIO REFOYO
antonio@lamiradanegra.es

www.myspace.com/nightbynightmusic

review: D13 (Betray)

8/10

Me sirven las influencias mencionadas por la propia banda en la biografía que nos hicieron llegar junto con este CD para describir el estilo de D13. Metallica les aportan la raíz clásica, lo pasan por el filtro contundente de Pantera y Machine Head, le dan el toque de innovación de Ill Niño y Deftones e inculcan la profundidad y parte de la elaboración de Tool. A esto añado yo mismo el atisbo de Disturbed que se deja notar en algunos momentos ya que, al igual que ellos, D13 esta en el centro de confluencia del metal actual y al clásico.

La producción del disco es pulcra. Los estudios Cube de Alberto Seara le han dado a estas canciones ese cariz cálido y maduro que suelen tener sus trabajos. Una garantía para apreciar los detalles de una banda que ofrece mucho más que contundentes riffs. De hecho, me esperaba algo más duro para arrancar que el homónimo tema que entra inmediatamente después de la intro. Es un corte que te tiende una red guitarrera nada cortante. La pegada la dejan en la base rítmica y comenzamos con una canción más centrada en la profundidad, que ya demuestra las ganas de la banda de ofrecer algo distinto. El siguiente “Hollow” ya me parece un tema de perfecta convivencia entre los distintos elementos de D13. Una muestra del labrado estilo de la banda. “Hidden Snake” se hace más experimental, dejando claro que tienen una gran posibilidad de crecimiento a partir de lo conseguido en esta carta de presentación. Por el contrario, el que más clásico color coge es “The Shell”. Terminan con un completo “Storm Within”, con muchos tintes de los mencionados Disturbed.

Amalgaman melodía y agresividad con maestría, uniendo ambas sin mezclas chocantes, pero mostrando una propuesta suficientemente distintiva en estos tiempos de tanta creatividad en nuestras emergentes bandas. Quedar en tierra de nadie, en este caso, cabe valorarlo como algo positivo, puesto que con multitud de influencias declaradas estos burgaleses consiguen algo original y abierto, algo que el público debería de valorar ante tanta saturación. Lo que pasa que ya sabemos que no encuadrarte de pleno en un terreno concreto también puede tener el efecto inverso. Puede que los más cañeros vean en ellos una banda demasiado melódica y profunda, mientras que los más afines a la melodía y la elaboración pueden percibir esto como algo demasiado atronador. Mi consejo es no cerrarse porque D13 dejan un trabajo de contrastada calidad, interesante y destacado entre todo lo que surge en esta poblada escena del metal. Con este primer paso han buscado y encontrado un estilo que les abre muchas posibilidades para crecer. Ahora solo falta seguir acumulando canciones que se sumen a estas 5 que nos ofrecen en “Betray”.

ANTONIO REFOYO
antonio@lamiradanegra.es


Componentes:
Raúl Diez – Voz
Iván Bravo – Guitarra
Roberto Araus – Bajo
Iván Olano – Batería

www.myspace.com/d13metal

review: VITA IMANA (En Otro Lugar)

8/10

Ya estamos con las odiosas comparaciones. No se si Vita Imana serán de los que las vean como un halago o piensen que tienen mucho de personalidad propia que haya de reconocérseles, pero es que no creo que alguien sea capaz de hablarme de este disco sin mencionar a Soulfly. Es evidente que, más allá de la incorporación de ritmos tribales, el estilo es afín en sonido de guitarras y voces a los de Max Cavalera. Algo más que una influencia, es sin duda el germen que ha dado vida a Vita Imana. Pero alguien tiene que abrir camino y siempre habrá alguien que deba continuarlo. En beneficio de Vita Imana hay que decir que de una manera tan clara como ellos, probablemente no haya otra banda que cantando en castellano se haya lanzado por estos terrenos. Sí con estas influencias, pero no integrando tan de lleno esta multiculturalidad en base a unos ritmos que llenan de vida todas estas composiciones de aplastante y duro metal.

Valoren ustedes como crean conveniente que aquí no tengamos a la banda más innovadora del momento. De lo que objetivamente puedo dar fe es que este disco mete a la banda en la actualidad del metal con un sonido espectacular. No deja de ser algo muy orgánico, pero a la vez consiguiendo que esta música se plasme en todo su esplendor. El sonido sacado de los Sadman Studios de Madrid deja que la música ofrezca todo su relieve, llegando a notar lo abrasador de esas guitarras pulverizantes, una voz cavernosa que te llega tan potente e integra que casi parece que puedes notar su aliento y una base rítmica envolvente con mucho groove en la que se integran muchos de los detalles, nítidos, que le dan a Vita Imana su toque característico. Todo viene acompañado por una estupenda maquetación de las que hacen merecer la pena tener este disco original en casa. Una presentación muy acorde con lo salvaje del sonido del grupo, que tampoco te engaña, porque hasta la imagen de portada se me hace muy Cavalera. ¿A ti no?

Hasta aquí muy bonito el decorado, pero de nada serviría si no tenemos un buen contenido. Seguro que ya lo estabais pensando. Pues bien, Vita Imana sí tiene contenido en forma de un puñado de canciones labradas artesanalmente, que en un disco de debut llega a rozar el sobresaliente por el curro compositivo que llevan y porque son capaces de transmitir esa crudeza realmente viva que la banda nos quiere hacer llegar. Una visceralidad que emana de la propia tierra que remueven estos temas a medida que van pasando. Destacaría prácticamente el disco entero, pero especialmente identificativo me parece “Gondwana”, con los ritmos tribales sobresaliendo y dando a esta música un carácter multiétnico muy bien acogido. Los riffs de guitarra queman, como podrás comprobar nada más iniciar con “Nada Por Ti”. La banda puede ser directa como en “Sin Piedad”, pero además de aplastarnos como a un “Parasito”, también pueden tener la profundidad de hacer la instrumental “Taikos”, la elaborada “No Quieres Creer” o la penetrante “Vita Imana”.

Puede ser evidente su procedencia musical, lo que a los buscadores de nuevas sensaciones les puede tirar para atrás, pero “En Otro Lugar” es un trabajo argumentado de principio a fin, buscando, indagando y encontrando nuevas capas para que una clara influencia no signifique que estos chicos no quieran tener sus propias creaciones. Muchas bandas que pisan por terrenos ya totalmente devastados por otros grupos que han llegado a ser gigantes no consiguen encontrar terreno fértil en el que arraigarse con fuerza, pero en este caso hay que valorar lo complejo de esta propuesta, además de que es innegable el poder que emana de estos temas.

ANTONIO REFOYO
antonio@lamiradanegra.es

Componentes:
Javi: Voz
Pepe: Bajo y Coros
Dani: Batería
Miriam: Percusiones
Román: Guitarra y Percusiones
Puppy: Guitarra

www.myspace.com/vitaimanametal / www.vitaimana.com

review: ¡PENDEJO! (Cantos A La Vida)

7/10

La llamada a la atención la tienen garantizada estos holandeses en gran parte por sus letras en español. Han pasado tiempo en países latinoamericanos y también en España, aunque la entonación delata una mayor reminiscencia del otro lado del charco. También plasmada en la potencia con la que ejecutan cada uno de estos cortes de pesado metal, muy acorde con el sentimiento latino. Tanto es así, que temas como “Juanita” o “Arrecho Vengo” en su solo título ya traslucen esa curiosa procedencia latina, así como en su propia denominación.

Entre este último mencionado corte, del cual han grabado video clip, y que es de lo más demoledor, hasta el denso “Llorón”, cabe todo dentro del sonido stoner que nos propone la banda. Esa influencia estilística se plasma en cada una de las guitarras, muy bien envueltas entre su propio grosor y la corpulencia del bajo. Muchas veces te vas a acordar de los maestros Black Sabbath escuchando temas como “La Ruta” o “La Ola Negra”. Sin embargo, Pendejo tienen la doble cualidad de poseer influencias tan clásicas pero también mucho deje totalmente actual. Llegan a unos terrenos agresivos que se nos hacen muy contemporáneos, manteniendo a le vez el sonido de una banda de rock pura y básica. En este sentido, es destacable como a pesar de la contundencia con la que se expresa la voz es capaz de sacar una descomunal potencia sin llegar a romperse en guturalidad alguna. También llama la atención la aportación de la trompeta, que muchas veces suple al solo de guitarra, más centrada en los riffs. Creo que incluir este elemento más de lleno en los temas podría ser más acertado, ya que a veces parece que se mete solo como un elemento colorista. Le da un detalle de frescura al trabajo en cualquier caso.

Pendejo nos dejan un disco que nos explota en las manos desde que comienza a sonar “Flotadores”, momento desde el cual no van a bajar el nivel atronador de su sonido. Con esta contundencia cada uno de estos temas provocará un estruendo que no dejará de escuchar ninguno de tus vecinos. Tienen ese toque distinto que les va a venir muy bien para darse a conocer, sobre todo en países latinos. Me entran más dudas sobre la respuesta que obtendrán en los países no hispanohablantes, pero tendría huevos que, mientras que muchos siguen proponiendo la doble edición de discos en español e inglés, tuviera que ser una banda de fuera la que rompa esas fronteras del idioma que, salvo en contadas excepciones, nadie ha logrado abrir desde el lado de los de la lengua de Cervantes. Ojalá lo consigan.

ANTONIO REFOYO
antonio@lamiradanegra.es

www.pendejoband.com / www.myspace.com/pendejoband

crónica: STRAVAGANZZA 04/06/10 Bilbao (Rock Star)

Finalmente se truncó la posibilidad de ver a Stravaganzza presentando su nueva obra con esa esperada sección de cuerdas. Apenas días antes de su actuación en Bilbao Leo Jiménez y su banda anunciaban la imposibilidad de llevar a cabo tan ambicioso proyecto en directo durante toda esta gira, además de dar a conocer los planes del grupo de parar indefinidamente al final de la misma. Presupuse que este concierto estaría marcado por ello, ya que, con lo mal que suena eso de parón indefinido, los seguidores deberían tomar este como un concierto ineludible para decirle al grupo hasta lo antes posible. La banda nada dijo al respecto desde el escenario, asi que nos quedamos con lo publicado en Internet. Según eso, venían con la promesa de darlo todo, como siempre, aunque sus planes no se pudieran cumplir. Sin embargo, la sala Rock Star de Bilbao, sin tener una mala entrada, no llegó a igualar la ocasión en que les vimos por primera vez en este mismo recinto. Teniendo en cuenta que Leo en solitario dobló el número de personas de esta noche hacía apenas un mes en la capital vizcaína, parece que la gente está más por la labor de buscar la parte más directa del vocalista que de adentrarse en los terrenos profundos de Stravaganzza.

En cualquier caso, el ambiente fue de entrega mutua entre músicos y seguidores. Se trata de una banda que hace surgir la química, como ya hemos podido comprobar en anteriores giras. La actuación fue impecable en el aspecto musical. Sensacional una vez más la esencia que transmite Pepe Herrero con su particular forma de ver la música. Antes de iniciar el tema “Sin Amar” Leo le presentó como uno de los mejores compositores de este país, de lo que no quedan dudas escuchando temas como este. En esta ocasión, mientras que Pepe seguía con su falda habitual, Leo optó por no acompañarle en indumentaria, manteniendo simplemente la raya negra en la parte izquierda de su cara como elemento visual.

Es cierto que estamos ante una música en la que poder recrearse, pero Stravaganzza sigue siendo un grupo que transmite mucha fuerza en directo. Solo hay que centrarse en temas de arranque como “Cuestión De Fe”, “Oveja Negra”, “Mascara De Seducción” o el siempre emotivo “Grande”. Dentro de la cantidad de matices que se aprecian en estas canciones, hay que destacar la ejecución perfecta. Sobre todo personifico en el caso del vocalista, porque teniendo que bajar y subir la voz mucho más que lo acostumbrado en los terrenos más heavy metaleros, no le vimos fallar ni lo más mínimo en ningún momento. Tampoco es que sea algo nuevo la perfección en la ejecución por su parte, pero que quede claro que sigue demostrando por qué es considerado uno de los mejores cantantes, no solo de una franja de terreno concreta. Hay que decir claramente que en el mundo no hay muchos capaces de ofrecer estos recitales de voz.

Se explayó, contando también con la guitarra rítmica, en “Impotencia”. El comienzo a capella de “Mi Tempestad” puso los pelos de punta, aunque las sensaciones en vivo de “Raíces” no me llegaron tanto como en ese relajado final que deja mucho poso en ese último disco al que da título. Seguro que las orquestaciones en vivo hubieran ayudado muchísimo, aunque hay que decir que Nando Martin al piano hizo una estupenda labor toda la noche. Retomamos el pulso de un plumazo con “Que Te Follen”, un título curioso tratándose de Stravaganzza, pero que como Leo nos explicó trata sobre la violencia de género. “Hijo De La Luna” ya sabemos que la han acuñado como propia, si bien el impacto creo que no fue el mismo que el día que por primera vez la escuchamos versionada por ellos en este mismo recinto. En cualquier caso, es de las que ponen a cantar a su público como si de un mítico tema propio se tratara. “Dolor” fue presentada como la última de la noche, con el público subiendo en intensidad dejándose llevar por los agudos del vocalista.

Una primera despedida que no suele ser real y vuelta a las tablas. El final había dejado a la gente encendida y había que continuar por ese camino. Sin duda el cierre de concierto venía con tres de los temas más queridos por los seguidores del grupo. “Lágrimas De Sangre” nos devolvió en solitario a Leo y a Nando a las teclas, dejando en este caso un arranque de tema brillantísimo para poner a todo el mundo patas arriba. “Deja De Llorar” la tenemos que incluir entre las que deben ocupar un lugar de privilegio a tenor de cómo cantó el público y para el final, ese tema con el que conquistamos vuestros corazones, el tema que presentaba a esta banda hace unos años, en principio paralela a Saratoga para Leo. Hablamos de ese diálogo con “Dios” que sigue resultando emocionante. Un spring final del agrado de los fieles seguidores congregados esta noche.

Con buen sabor de boca después de lo vivido abandonamos la sala, pero con una sensación un tanto extraña dadas las circunstancias. La banda había estado a la altura bestial que nos acostumbra, pero pienso que tratándose de una gira un tanto especial, con anuncio de parón, pero (eso sí) con un estupendo disco que presentar, la respuesta de los fans del grupo debía haber sido más mayoritaria para demostrar su apoyo. No es que fuera una noche excesivamente floja, ya que en estos tiempos superar escasamente el centenar de personas puede entrar dentro de lo normal para las bandas nacionales, y quien estuvo se entregó con la pasión que evoca esta música; sin embargo, no dejo de sentir que este concierto fue como un paso de página algo frío, con muchos interrogantes en torno al futuro de Stravaganzza, que muchos siguen considerando como algo secundario dentro de la carrera del ex vocalista de Saratoga, decantándose ahora mayoritariamente por su grupo en solitario. No hace justicia a la calidad esgrimida por todo el grupo, pero es lo que conlleva salirse de unos parámetros establecidos para gran parte del público. La expectación de sus primeras visitas a Bilbao ya no existió y no se hasta que punto la gente se hubiera animado más si el grupo hubiera cumplido con los planes iniciales de contar con esa sección de cuerdas.

Texto y fotos:
ANTONIO REFOYO
antonio@lamiradanegra.es
MARI JOSE MARTIN
mari@lamiradanegra.es